cuando al comienzo de aquella melodia,
el silbido del viento les acompañaba,
arropaba aquel sabor de otros tiempos,
mientras yacian en mecedora de besos cual se amaban,
sepultados aquellos versos en vasijas de sueños,
aquella quimera de arrobamientos espera,
un haz de luz penetro por la rendija,
de su alma en volandas,
que grita,
y en un escolio de palabras el silencio les atrapa,
amar bordeando aquellos labios,
de carmin rosado,
oh!!!! mi amante,
mi enamorado,
titilante luz que sucumbe a un deseo de ensueño,
donde pacen en sigilo los enamorados,
aletargados en versos fueron hayados.....MARIA


Gracias por vistar mi blog, el tuyo esta muy hermoso estaremos leyendonos, que Dios te bendiga
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